Cuentos: la conversión de Liu Haichan
Liu Haichan fue un filósofo del siglo décimo d. C., actualmente recordado como un taoísta “inmortal” y patriarca del taoísmo, pero antes de entrar en el camino superó el más alto nivel de los exámenes imperiales y se involucró en asuntos políticos, al servicio del Emperador Abaoji, primero como ministro y luego como Primer Ministro.
Cuando se encontraba en la cumbre de su gloria terrenal, se cuenta que un monje taoísta llegó ante él y le pidió diez huevos y diez monedas de las que llevan un cuadrado en el centro. Liu Haichan le dio al monje lo que le pidió y entonces vio con asombro cómo empezó el monje a balancear eso en una torre, un huevo sobre una moneda, con una moneda encima de ese huevo, luego otro huevo, y así.
-¡Eso es muy peligroso! -dijo Liu Haichan.
El monje sonrió y respondió:
-La posición de un Primer Ministro es mucho más peligrosa.
Ese día, Liu Haichan renunció a su cargo y empezó a seguir el camino taoísta.
Traducido por Vadan Juan Camilo Betancur Gómez