Hazrat Inayat: El símbolo del sol
En una publicación anterior, ofrecimos la introducción general de Hazrat Inayat Khan al estudio de los símbolos. A continuación, consta su entendimiento acerca del símbolo del sol.
La luz tiene la mayor atracción para el alma humana. Al hombre le encanta en el fuego y en las cosas que son brillantes y resplandecientes, y es por esto por lo que considera preciosos al oro y a las joyas. El cosmos tiene una mayor atracción para él que la tierra, por la luz. A medida que el hombre evoluciona, naturalmente deja de mirar hacia abajo a la tierra, pero mira arriba al Cosmos, los cielos. El objeto más atractivo que ve es el sol en los cielos, el sol sin soporte alguno y que es más luminoso que todo en los cielos. Por ello, así como al hombre le atrae la belleza y se rinde ante la belleza, se inclina ante el sol como la mayor belleza en el cielo, y el hombre tomó al sol como el símbolo de Dios en la Naturaleza.
El símbolo lo retrata en formas diferentes, en Persia, China, Japón, Egipto siempre que se retrataba a Dios, se lo hacía en forma de sol. En todas las eras el hombre ha retratado a su profeta, maestro, salvador, con un sol alrededor de su cabeza. En la antigua Persia solía haber un disco detrás de la cabeza del rey, retratándolo como el sol, y solían llamar Zardash a este disco. El nombre de Zaratustra tiene el mismo origen, la palabra simplemente significaba disco dorado. En los templos hindús y budistas alrededor de la imagen de diferentes avatares está el signo del sol, y este símbolo fue usado tanto en Oriente como en Occidente en turbantes y sombreros. Hoy en día, hay personas en India que ponen en sus turbantes una banda de bronce que representa al sol.
Un estudio más profundo del sol sugiere las cuatro direcciones de las líneas que se forman a su alrededor. Este signo es el origen del símbolo de la cruz. Las tradiciones antiguas demuestran que la idea de la cruz existió en oriente antes de la venida de Cristo, especialmente entre los Brahmanes. Es de este signo que los dos brazos sagrados se hicieron, Chakra y Trissoun. El Islam, la religión que no permite simbolismos, tiene en la construcción de las mezquitas el mismo simbolismo del sol. Sea que el nombre del sol se escriba en persa o en árabe, tiene la forma de la mezquita.
El hombre, como ocurre que es su naturaleza, ha culpado a los adoradores del sol y se ha burlado de ellos, pero jamás ha logrado desarraigar el encanto, la atracción que tiene el alma humana por el sol.
Traducido por Baasit Patricio Carrillo