Más acerca de evolución
Una reciente publicación sobre la evolución citaba la sincera súplica de Mevlana Rumi de considerar cuán valiosos somos, y de no vendernos por un pequeño precio. La publicación concluía con esta pregunta: ¿A quién o a qué he vendido mi ser? Y ¿es posible cancelar el contrato?
Cada logro viene con algún costo. Hazrat Inayat Khan, sabiendo que sus estudiantes vivían en un mundo muy material y comercial, les aconsejaba pensar de esta forma: algunas cosas deben pagarse por adelantado, algunas las pagamos cuando son entregadas, y algunas otras se pagan más tarde, cuando se presenta la factura. No deberíamos equivocarnos, en otras palabras: nada es gratis, todo tiene un costo. Aun el “aire libre” no es gratis, porque lo respiramos mediante un cuerpo físico, y por lo tanto enfrentamos el inevitable impuesto de la muerte cuando el cuerpo deja de funcionar.
¿Qué es lo que hace al ser humano tan valioso? No es simplemente que hayamos sido formados por el Creador, porque todo en el cielo y la tierra son obra Suya, sino que Mevlana Rumi dice que el humano es especial, es aún más valioso. ¿Por qué?
La luz de la Perfección es omnipresente, todo lo compenetra, pero es el corazón del devoto el que puede sostener esa luz. Pero ese regalo no llega automáticamente – debemos estar dispuestos a hacer de eso nuestra meta, y sacrificarlo todo por ello. Si usamos nuestra vida para buscar algo limitado, como riqueza material, o nombre y fama, podemos tener éxito, pero ¿a qué costo? Las oportunidades de la vida se gastarán en perseguir algo que nos puede ser arrebatado en un momento. Hacer que nuestra meta sea el Infinito tiene el mismo costo – debemos sacrificar nuestro tiempo y pensamiento, y al final a nosotros mismos en búsqueda del Uno – pero la recompensa es algo que nunca se puede arrebatar.
Obviamente, el camino de cada persona es diferente. Tenemos varias responsabilidades que cumplir, y no podemos abandonar a quienes dependen de nosotros. Pero al mismo tiempo, deberíamos considerar cuidadosamente lo que estamos buscando y dejar ir, tanto como sea posible, todo lo que simplemente alimenta al ego.
Las metáforas pueden ser poco creíbles si las tomamos muy literalmente, pero una forma de cancelar el contrato es simplemente rechazar la entrega.
Traducido por Inam Anda