Hazrat Inayat: No una Nueva Religión
El siguiente es un discurso dado a los Cherags del Culto Universal en 1925. ‘Cherag’ significa lámpara, el que entrega luz, y es el nombre para aquellos que se ordenan para servir en este servicio devocional.
Mis bendecidos Cherags,
¿Es el Mensaje Sufí una nueva religión? Esta pregunta surge muy a menudo, y en respuesta yo diría que es el mismo viejo vino puesto en botellas nuevas. Les daré un ejemplo, el ejemplo del Budismo y el Brahmanismo y su trabajo en la India. Originalmente la religión de los Hindús era el Brahmanismo, y si me permiten explicar lo que es el Brahmanismo, la palabra viene de Brahma, el Creador. Brahmanismo significa reconocer al Creador en todas Sus formas. Después llegó un momento en el que los Hindús necesitaban una idea más lógica. Eran devotos, eran meditativos, pero era necesario tener una idea lógica. Entonces vino Buda, y el Budismo se hizo predominante, y permaneció en la India durante miles de años. Entonces vino una ola de Brahmanismo nuevamente, una ola arrasadora que eliminó el Budismo y estableció el Brahmanismo de nuevo. Esto ocurrió en el tiempo de Shankaracharya.
Uno podría preguntarse, ¿por qué el Brahmanismo que existía originalmente no fue suficiente para ellos? Cuando leemos y estudiamos los Vedantas, encontramos que es bueno para todas las épocas, incluso para diez mil años más; es tan bueno como ha sido siempre. No fue la falta de filosofía, fue el toque personal que Buda tuvo que dar, una idea lógica para remover la magia y superstición que habían incrementado. Era necesario que viniera una ola para llevarse todas estas ideas, y les entregara el mismo Brahmanismo de nuevo. Fue la misma esencia del Vedanta que Buda dio a la gente. Si lo que se necesitaba era sólo una filosofía, hubieran podido aprenderla, pero fue el toque personal del Maestro lo que dio la fuerza para mantener la enseñanza por miles de años. Fue el toque de vida, que es el verdadero sacramento. Después de un período de Budismo, y cuando la gente corrompió las ideas de Buda, y cuando el Budismo se había desgastado, llegó nuevamente el mensaje de Shankaracharya, y ¿qué fue lo que trajo al pueblo de India? Solamente arrasó con la corrupción que existía. En otras palabras, el Mensaje era el mismo. Cuando llegó, sólo eliminó las falsas concepciones sobre el mensaje de Buda, y trajo nuevamente la idea que era necesaria – la idea de creer en Dios.
El Mensaje que el Movimiento Sufi debe cumplir en el mundo no tiene la forma de una nueva religión. No es una nueva religión, es una nueva forma; y la necesidad de una nueva forma es tan grande que incluso la naturaleza da una nueva forma a cada planta durante la primavera, y la ciencia dice que cada siete años la piel cambia. El Mensaje es el renacimiento de la misma única religión. Puede parecer extraño que justo ahora la idea se ponga en una forma universal a la que la gente no está acostumbrada. Conocen la religión sólo de una forma, no de muchas. Pero este es el cumplimiento de la oración de Moisés, la aspiración de Jesucristo, el deseo de Mahoma, el sueño de Abraham. Todos deseaban que llegase el día en el que la humanidad no estuviese más dividida en diferentes secciones.
La misión del Mensaje Sufi es que, en lugar de dar una nueva forma de adoración, junta todas las formas en una sola, para que nadie diga: mi forma de adoración ha sido dejada de lado. Da ejemplos para que los seguidores de todas las religiones puedan hacer sus alabanzas al mismo tiempo. También une a todos los Maestros conocidos y desconocidos para el mundo como diferentes cuentas de un mismo rosario. ¡Imaginen estas ideas extendiéndose y penetrando a todos aquellos separados por diferencias en credos! ¿Hay algún ser humano que no quisiera que haya una sola Verdad y una idea de Dios entendida por todos? Esta no es una nueva religión para molestar a los pensativos, para confrontar a las mentes que están tranquilas, a los corazones que sienten profundamente. Este es el Mensaje que estará de acuerdo con su anhelo más profundo, y es con esta esperanza que hoy tenemos necesidad del Mensaje.
Cuando el Cherag realiza su servicio, el poder se derramará y esparcirá, y las bendiciones dadas por los Cherags serán la bendición de todos los Maestros de la humanidad. Los Cherags deben ser conscientes de este gran poder. El poder está limitado cuando no todos son reconocidos, está a plenitud cuando la devoción hacia todos los Maestros se entrega en forma de bendición. Mientras más reconozcan los Cherags lo sagrado de este poder, más cuenta se darán de sus efectos. Todo lo que tiene vida, por pequeño que sea, promete crecer. Cualquier cosa que esté muerta, por grande que sea, no se expandirá, no crecerá. Es con esta confianza en nuestros corazones que debemos trabajar, sin mirar los números pequeños, pero con el conocimiento de que es el Mensaje prometido, que se extenderá a todas partes del mundo algún día, y que es nuestro gran privilegio iniciarlo.
Mis bendecidos Cherags, si observan la vida claramente, con los ojos abiertos, no será difícil para ustedes sentir el poder del Mensaje. Toda oposición, tarde o temprano, debe decaer, con todo lo que tengamos que sufrir; y, a pesar de la oposición, el Mensaje está vivo y encontrará su camino a través de todas las dificultades, y esta creencia establecida firmemente en nuestros corazones nos permitirá cumplir nuestra misión en la vida.
Traducido por Darafshan Daniela Anda