Hazrat Inayat: Espíritu y Materia pt IV
Mientras continúa con su explicación filosófica del espíritu y la materia, Hazrat Inayat Khan explica que estos dos son solo diferentes estados de la misma vida. La publicación anterior puede encontrarse aquí.
Espíritu y materia son los dos nombres de la vida. La esencia de la vida que se está volviendo densa sigue siendo espíritu, y su desarrollo a la forma densa se llama materia. Es como el agua volviéndose nieve, es líquida, pero se convierte en una sustancia más dura, pierde su finura.
Existe un conflicto entre espíritu y materia. La materia absorbe al espíritu para existir, y el espíritu asimila la materia, porque es de su propiedad. Toda la manifestación puede entonces ser vista como un conflicto continuo entre el espíritu y la materia, el espíritu convirtiéndose en materia por una parte y por otra el espíritu asimilando la materia; lo primero es llamado actividad y lo segundo silencio, o construcción y destrucción, o vida y muerte. Cuando nos damos cuenta de que la fuente de ambos, del espíritu y de la materia es la vida, entonces vemos que tal cosa como la muerte no existe; pero esto solo puede reconocerse al conocer la diferencia entre la vida que puede ser llamada la fuente y la vida que es temporal, la vida que la materia muestra al absorber el espíritu.
El vacío o el espacio consumen sustancia; y cuando la sustancia absorbe vida del espacio, el espacio se abre dentro la sustancia. Por ejemplo, los árboles y las plantas absorben más del espacio que las rocas, y los animales absorben aún más del espacio que los árboles y las plantas. El hombre absorbe el mayor espíritu del espacio, y por lo tanto el hombre representa tanto la materia como al espíritu en su ser.
Lo que se absorbe del espacio tiene el efecto sobre aquello que lo absorbe de abrirlo y formar un vacío. Es por eso que, la roca, que tiene muy poco vacío en ella, aparece como inerte. La vida de las plantas muestra algún signo de vida porque absorbe mas del espacio. En los átomos de la vida de una planta hay una apertura, pues absorbiendo todo lo que puede ser absorbido del espacio, la planta abre dentro de si espacio para acomodar también al espíritu que absorbe. Vemos un desarrollo superior del mismo fenómeno en la vida animal, que, a través de la respiración, absorbe más del espíritu que está en el espacio y por lo tanto se vuelve más inteligente.
Esto muestra que, aunque la inteligencia se manifiesta a través de los seres vivos, en realidad es absorbida del espacio. Solo conocemos la inteligencia como algo que pertenece al hombre, a la mente o al corazón; ¿pero de dónde es atraída la inteligencia? Es atraída del espacio. Reconocemos la inteligencia en su manifestación, pero no la conocemos en su esencia. En su esencia lo compenetra todo y es por esto que la gente con mente filosófica ha llamado a Dios omnisciente.
Todo lo construido está sujeto a la destrucción; todo lo compuesto debe ser descompuesto; todo lo formado debe ser destruido; aquello que nace muere. Pero todo eso pertenece a la materia; el espíritu que es absorbido por esta formación de la materia, o por sus mecanismos, vive, porque el espíritu no puede morir. Lo que llamamos vida es una absorción del espíritu por la materia. Mientras que la materia es fuerte y tiene suficiente energía para absorber vida o espíritu del espacio, continúa viviendo y moviéndose y estando en buena condición. Cuando pierde el agarre del espíritu, cuando no puede absorber el espíritu como debiera, entonces no puede vivir, porque la sustancia de la materia es el espíritu.
Continuará…
Traducción al español: Hafiz Juan Manuel Angel