Hazrat Inayat: El Problema de Hoy, parte III
Hazrat Inayat Khan continúa con su consideración del aspecto físico del problema de hoy, animándonos sobre todo a llevar una vida natural y permitir que la vida experimente la vida. La publicación anterior de la serie se encuentra aquí.
Otra cosa es que la vida debe tener su plena expresión; al comer, al beber, debemos tener una elección, hay que tener el gusto desarrollado, es uno de los cinco sentidos; si este sentido no se satisface, lo principal de la vida no se satisface. El pequeño bebé, en cuanto llega, lo primero que quiere es alimento. Y no pienses que el alimento está sólo en el mundo material, sino que también en el mundo espiritual lo que necesitas es alimento. Desde el principio hasta el final hay apetito y hay alimento.
Además de esto, la vida actual obliga al hombre a tener horas designadas, horas fijas incluso para el alimento; lo que es permisible en cada momento del día ha sido tan regulado hoy en día que las madres enseñan a sus hijos también a ser puntuales en pedir su alimento, y privan de libertad, desde el principio, al apetito natural que tiene sus momentos como una ola. Es una ola que viene como un apetito pidiendo alimento. Pero el niño debe saber que no es la hora de la cena. En la infancia, cuando es un rey de la vida, viene con ese apetito natural y con sed, cuando desea comer y beber, pero nosotros con nuestros convencionalismos en el mundo, y las normas y reglamentos, decimos: “No, este no es el momento; en el momento adecuado se te dará el alimento”.
Son todas estas cosas las que limitan la vida. ¿Por qué la gente tiene una vida corta? En la antigüedad la gente vivía más tiempo porque vivía una vida natural. Ahora viven poco tiempo porque sus vidas están divididas por leyes hechas por el hombre. Los pájaros y los animales de los bosques no saben de médicos ni de doctores y no saben de prescripciones médicas. ¿Por qué? Comen cuando tienen hambre, duermen cuando desean dormir y beben cuando sienten sed. No comen cuando no les apetece comer. Cuando una persona no come cuando ha llegado la hora, entonces todo el mundo en la familia preguntará: “¿Por qué no comes, qué te pasa, qué ha ido mal?”. De todas partes vendrán a preguntarle: “¿No quieres comer?. No es bueno que no comas”. Y luego viene la abuela a convencerte de que tienes que comer cuando no te apetece. O debes comer esto o aquello; y el médico te dice que no debes comer mucho de esto, y que debes comer mucho de aquello. Lo único que hay que tener en cuenta es que lo que te gusta, eso es lo mejor que puedes comer, tu amor por ello, tu gusto por ello lo convierte en una medicina para ti.
Ahora hablan de análisis, de que ciertos elementos están en ti, y para armonizar con esos elementos debes comer otros ciertos elementos. Es muy bueno para la ciencia, hay que leerlo con interés. Pero, ¿crees que ese análisis nos dará satisfacción en la vida? !No!. La naturaleza es perfecta, y esa perfección se refleja en tu propio corazón. En todo momento estás inspirado por esa naturaleza; todas tus inclinaciones en la vida están inspiradas por esa naturaleza, y si esas leyes externas te dicen que no debes tenerla, ¿qué significa eso? Significa que el hombre se interpone como un obstáculo en el camino de Dios. Dios inspira desde dentro, y el hombre dice: “No, eso no debe ser”.
Lo que queremos en la vida actual es la simplicidad; menos complejidad en la vida, menos convencionalismo. Y lo que es más deseable ahora es mantenerse cerca de las leyes de la naturaleza y permitir que la vida experimente la vida.
Continuará…
Traducción: Abdel Kabir Mauricio Navarro J.