Hazrat Inayat: ¿Qué es un Sufi? Parte VII
Hazrat Inayat Khan comienza ahora a considerar en qué cree un sufi, o en otras palabras, si existe alguna creencia que sea específica del sufismo. La publicación anterior de la serie se encuentra aquí.
¿Es el sufismo una religión? Debe quedar claro por la explicación anterior [es decir, en las publicaciones anteriores] que la religión del sufi no está separada de las religiones del mundo. La gente ha luchado en vano por los nombres y las vidas de sus salvadores, y han bautizado sus religiones con el nombre de su salvador, en lugar de unirse unos con otros en la verdad que se enseña. Esta verdad puede rastrearse en todas las religiones, tanto si una comunidad llama a otra pagana o infiel o hereje. Tales personas afirman que la suya es la única escritura, y su lugar de culto la única morada de Dios. El sufismo es un nombre aplicado a cierta filosofía por aquellos que no aceptan la filosofía; por lo tanto, no puede describirse realmente como una religión; contiene una religión pero no es en sí misma una religión. El sufismo es una religión si uno desea aprender religión de él. Pero está más allá de la religión, pues es la luz, el sustento de toda alma, que eleva al ser mortal a la inmortalidad.
Tal como están las cosas hoy en día, cada uno afirma que su propia religión es la mejor, y tiene su propia religión. El Sufi las tolera a todas, y las considera todas suyas; por lo tanto, no pertenece a una religión, sino que todas las religiones le pertenecen. Él puede ver todas las religiones como tantas clases en una escuela: algunos están en una clase, otros están en clases superiores, es decir, algunos estudian la vida más profundamente. Y en cada clase de la escuela hay alumnos a los que les gusta jugar.
Decir: “Tú no eres de mi religión; sólo mi religión es verdadera”, es tan razonable como decir: “Tú no eres un abogado, un comerciante, un letrado; tu forma de llevar la vida es falsa; debes llegar a ser como yo”. Decir: “Todos los que están en mi religión se salvan” es tan razonable como decir: “Todo abogado, comerciante, erudito (según sea el caso) es dedicado, y realiza su trabajo perfectamente”. Algunos hablan de cristianos “teóricos” y cristianos “verdaderos”; esto es sólo otra manera de decir que algunas personas son muy dedicadas a su trabajo y otras juegan.
¿Es el sufismo una creencia? ¿Qué queremos decir con la palabra “creencia”? La naturaleza de la mente es creer, y la incredulidad viene después. Ningún incrédulo nació incrédulo; porque si un alma no creyera desde la infancia nunca aprendería a hablar. Todo el conocimiento que el hombre posee lo ha adquirido creyendo. Cuando refuerza su creencia mediante el conocimiento, entonces viene la incredulidad en cosas que su conocimiento no puede asimilar, y en cosas que su razón no puede justificar. Entonces deja de creer en cosas en las que antes creía. Un incrédulo es aquel que ha cambiado su creencia por la incredulidad; la incredulidad a menudo oscurece el alma, pero a veces la ilumina. Hay un dicho persa que dice: ‘Hasta que la creencia no se ha convertido en incredulidad y, de nuevo, la incredulidad en creencia, un hombre no se convierte en un verdadero musulmán’. Pero cuando la incredulidad se convierte en un muro y se opone a una mayor penetración de la mente en la vida, entonces oscurece el alma, porque no hay posibilidad de un mayor progreso, y el orgullo y la satisfacción del hombre en lo que sabe limitan el alcance de su visión.
Continuará…
Traducción: Abdel Kabir Mauricio Navarro J.