Cuentos: progreso rápido
Ocurrió una vez que cierto perro se dispuso a viajar de una ciudad a otra, y aunque el camino era largo, llegó en muy poco tiempo.
Los que había venido a visitar quedaron asombrados. “¿Cómo puede ser?”, le preguntaron. “Llegaste tan rápido, ¿cuál es la explicación?”
“Bueno,” respondió el perro, “podríamos decir que se debe a la amabilidad de tantos perros en el camino”.
“¿Su amabilidad?”
“Sí. Cuando me cansaba y quería descansar, venían corriendo hacia mí y trataban de morderme. ¡Y así tenía que seguir avanzando!”
Traducido por Juan Amin Betancur V.