Cuentos: Cuando estaba vivo
Ocurrió una vez que Mullah Nasruddin estaba tratando de cortar una rama de un árbol, pero lo estaba haciendo de una manera inusual: estaba sentado en la rama y cortándola entre él y el tronco del árbol.
Un hombre que pasaba por debajo vio lo que estaba haciendo y le dijo: “Mullah, si lo haces así, te vas a caer del árbol”.
Nasruddin no prestó atención, siguió cortando la rama y, de repente, con un fuerte crujido, cayó al suelo.
Maltratado pero vivo, Nasruddin se puso de pie y salió corriendo detrás del hombre. “¡Debes tener poderes psíquicos!” el exclamó. “¡Sabías que me iba a caer!”
El hombre trató de explicar, pero el Mullah no quiso escuchar. “Dime entonces, sabías de la caída, ¿cuándo voy a morir?”.
El hombre quería alejarse de Nasruddin, pero el mullah fue persistente y finalmente el hombre dijo: “Está bien, entonces escucha, cuando tu burro rebuzne tres veces mientras lleva una carga de heno cuesta arriba, ese será el momento en que tú mueras”.
Unos días después, ocurrió este evento preciso: el burro de Nasruddin rebuznó tres veces mientras cargaba heno por una colina, después de lo cual el mullah miró hacia el cielo y dijo: “¡Ah! ¡Entonces estoy muerto ahora!” y se acostó en el suelo.
Al rato, alguien lo encontró y lo llevó a su casa, donde lo vistieron con ropa limpia, dijeron algunas oraciones y lo metieron en un ataúd para llevarlo al cementerio.
Sin embargo, en el camino, los hombres que llevaban el ataúd llegaron a una bifurcación en el camino y empezaron a discutir sobre cuál era la ruta más corta al cementerio. Dejando el ataúd, mantuvieron una interminable discusión sobre qué camino tomar.
Finalmente, Nasruddin se sentó en el ataúd y dijo: “Escuchen, cuando estaba vivo, era POR AHÍ”.
Traducción por Yaqín Anda