Dadu Dayal: Tantas como son las olas del mar
Para más información sobre el místico y poeta Dadu Dayal (1544 – 1603 d.C.), véase
esta publicación anterior.
Tantas como son las olas del mar,
tantos son los deseos de la mente.
Deteniéndolos todos, uno se sienta con plenitud
sosteniendo el pensamiento del Uno
en sí mismo.
Como en la presencia de un imán, el hierro
es atraído,
así tú apegas tus sentidos, la mente
y disposiciones sólo al Uno.
Cuando uno descubre el verdadero asiento
de la mente, entonces todas las regiones
aparecen a su vista.
Cuando el lleva los cinco sentidos
a ese punto, entonces los secretos
de las sagradas escrituras
le son revelados.
La mente voluble vaga en las cuatro
direcciones. Átala con las instrucciones
del Maestro,
y llévala a la compañía
del santo, entonces se unirá
con el Señor Supremo, O Dadu.
Haciendo millones de esfuerzos, muchos fueron
consumidos por la muerte, pero la mente
continuó corriendo en las diez direcciones.
Sólo con el Nombre de Dios como barrera
se detendrá; no hay otro camino.
Que la mente sea el caballo, el aspirante vigilante el jinete,
y la atención centrada en la brida;
usando la palabra como látigo,
algún aspirante sabio y santo alcanzará
la meta.
Vencer la mente por medio
del Nombre; disciplínala mediante
las enseñanzas de los santos.
Elimina cualquier dualidad que exista, entonces
habrá dicha interior, O Dadu.
Una vez que la mente está apegada a Dios,
¿cómo puede ir a otra parte?
Como la sal se disuelve en el agua, entra
en el Señor, oh Dadu.
Traducción al español de la traducción K. N. Upadhyaya
por Arifa Margarita Rosa Jáuregui