Más acerca de Eliminar Perturbaciones
En una publicación reciente de algunos de los Sutras Yoguis de Patanjali, se presentaron algunas de las perturbaciones que impiden la claridad de la mente, tales como la duda, malentendidos, la falta de desapego y la inestabilidad. Estas son muy similares a las condiciones que Hazrat Inayat Khan describió en esta publicación como el óxido que cubre el espejo del corazón: confusión, miedo, depresión y toda clase de excitación. (Puesto que la excitación implica agitación, en este contexto se la puede equiparar con la inestabilidad.) Para que podamos lograr el reconocimiento de la Realidad, nuestra mente debe ser aquietada, de manera que la cualidad de espejo de la conciencia pueda reflejar lo que siempre ha estado ahí.
Como un método de preparación, Pratanjali da una recomendación que podría parecer simple o incluso superficial: ser amigable con aquellos que son felices, ser compasivo con aquellos que sufren, regocijarse junto a los virtuosos, y ser ecuánime hacia aquellos que no son virtuosos. Si observamos con cuidado este sutra, sin embargo, vemos que pone en positivo la necesidad de lidiar con tendencias negativas tan comunes que pasan desapercibidas en nuestra vida diaria. Muy a menudo, ver a una persona feliz o virtuosa despierta un sentimiento negativo de envidia, celos o resentimiento; si no sentimos compasión por el sufrimiento de otra persona, nuestra falta de solidaridad reafirma su desdicha y deja abierta la posibilidad para que mostremos crueldad en alguna circunstancia; y si no somos ecuánimes y desapegados con aquellos que no son virtuosos, manifestamos crítica e intolerancia.
Cuando estas actitudes negativas se han eliminado, entonces, como Patanjali dice, la mente se vuelve lúcida y no es difícil fijarla sobre un punto, de donde sigue todo entendimiento. Es por eso que el buscador sincero podría considerar esto que sigue como un ejercicio para una semana o más: buscar estas cuatro categorías de personas, tan bien como para poder juzgar: los felices, los virtuosos, aquellos que sufren y aquellos que (a nuestra forma de ver) no son virtuosos, y despertar los sentimientos positivos que el sutra recomienda. Si esto se hace de forma persistente, ciertamente comenzaremos a experimentar un modo diferente de conciencia.
Traducido al español por Darafshan Daniela Anda