Cuentos: El Mulá comparte sus ganancias
Ocurrió alguna vez hace mucho tiempo que el Mulá Nasrudín decidió que quería hablar con el rey. Como nunca había ido a la corte, parecía una cosa difícil de lograr, pero Nasrudín no se detuvo en esas pequeñeces. Se puso su segundo mejor turbante (porque el mejor había sido vendido para pagar algunas deudas), sacudió el polvo de sus trajes y se fue a la puerta del palacio.
Allí, Nasrudín solicitó admisión al cuarto del trono, pero un guardia enorme lo miró con desdén y dijo “¿Qué tipo de negocios podría tener un andrajoso como tú con el rey?”
“Amigo”, dijo Nasrudín, “Soy un letrado Mulá, y puedo asegurarte que cuando hable con él, su alteza me concederá mas de lo que tienes en las manos y los pies. Si me dejas entrar”, y añadió, “compartiré contigo lo que reciba. Tendrás la mitad de lo que sea que el rey me conceda”.
El guardia dudaba aun, pero la idea de lograr la mitad de lo que fuera que Nasrudín recibiría lo convenció, así que lo dejó pasar, diciéndole que fuera directo a las grandes puertas de la entrada del salón real. “Pero asegúrate de recordar tu promesa”, dijo, “o ¡lo lamentarás!”
Cuando Nasrudín llegó a las puertas de entrada, otro guardia se interpuso en su camino, y no quería dejarlo pasar. De nuevo Nasrudín dijo, “El rey me concederá mas de lo que tienes en las manos y los pies. Si me dejas entrar, tendrás la mitad de lo que sea que el rey me conceda”.
Este guardia también dejó pasar a Nasrudín, solo advirtiéndole con fiereza que si no cumplía su promesa se arrepentiría.
Entonces el Mulá se encontró a sí mismo frente al rey. “¿Quién es usted?” preguntó el rey. “¿Qué quiere?”.
“Quiero más de lo que usted tiene en las manos y los pies”, dijo Nasrudín.
“¿Qué?” gritó el rey. “¡Que imprudencia! Recibirás mas golpes de palo de lo que tengo en las manos y pies, ¡Mulá ignorante!”
“Muy bien”, dijo Nasrudín. “Su majestad sabrá. Pero deberá darle la mitad de los golpes al guardia del cuarto del trono, y la otra mitad al guardia de la puerta del frente, pues ellos estuvieron de acuerdo en recibirlos por mí”.
Traducción al español: Hafiz Juan Manuel Angel